JUAN MONTIL - REDACTOR SEO

BIENVENIDO

Aquí encontrarás diversas alternativas para optimizar el contenido de tu empresa o proyecto

Leer más
REDACTOR SEO

Un redactor SEO debe ser un escritor, y si es un escritor de ficción, mejor. Lo que ocurre es que, en este punto, nos encontramos con que los escritores de ficción suelen padecer lo que yo llamo síndrome de la lavadora, que también podríamos denominar síndrome del mecafino o de cualquier cosa mundana que puedas imaginarte.

Parece que a muchos escritores de ficción les cuesta ponerse a escribir sobre algo que consideran (aunque no lo digan) indigno de su pluma. Estos presuntos pedantes ignoran que un verdadero escritor debe curtirse en todos los aspectos de la palabra escrita, asociada o no a la vida cotidiana. Deben saber describir un vaso igual que sus sentimientos ante la impresión de un paisaje.

Aunque a decir verdad, lo mejor, lo superóptimo, lo megachachi para Google sería que solo especialistas escribieran sobre las materias. Sí, sería deseable, y razonable, pero reconozcamos que casi imposible.

Salvo artículos how to sobre automoción o informática-tecnología, textos muy técnicos de derecho, de medicina o blogs de moda, la gran mayoría de contenido web que lees está escrito por redactores especializados en SEO que escriben de todo; algunos con mayor acierto, hay que decirlo.

Una de las reglas de un buen redactor SEO es que tiene que decir la verdad, debe ser fiel a la realidad e informarse adecuadamente sobre lo que va a escribir. La documentación lleva poco tiempo una vez se sabe cómo buscarla.

Es también importante no caer en la canibalización o en refriteo de información, una especie de endogamia en la Red a partir de la cual no se sale del círculo de la misma información, transformándola de innumerables modos. Para evitarlo, recomiendo por un lado la consulta en libros y, por el otro, el storytelling.

Respecto a este último anglicismo, te diré que es la aplicación de sucesos que te han pasado a ti a lo que estás escribiendo. Te pongo un ejemplo que me ocurrió a mí: hace años vivía en una casa de pisos con un cuarto de luces muy descuidado y sin limpiar. Fue venir los pintores especialistas en trabajo en altura, blanquear las paredes del patio y comprobar por mí mismo cómo se multiplicaba la luz natural en las habitaciones interiores.

Por supuesto, en las webs de reformas y en las de trabajos en altura, la rehabilitación de patios de luces es muy importante. Aquí un ejemplo de cómo transfundir tus experiencias personales a lo que vas a proponer a los demás, a las ventajas de que vas a hablar a los demás.

En cuanto a la información contenida en libros, se hace todavía más interesante y aliviaría la endogamia informativa, pero tiene dos inconvenientes: el tiempo y el pago que debe abonarse por acceder a algunos libros en Red.

Otra de las virtudes que ha de poseer un redactor SEO profesional es saber trabajar en equipo y, sobre todo, con la persona encargada del SEO. El técnico SEO es quien sabe cómo y cuándo dar las claves para que un texto se posicione.

Actualmente, los estudios de posicionamiento, las migraciones y otras acciones relacionadas, han convertido a los técnicos SEO en auténticos popes del mundo digital. El redactor, en resumen, debe tomarles muy en serio y realizar el encargo según todos los parámetros que el técnico indique.

Para terminar, un redactor SEO profesional debe conocer cómo se estructuran los textos. Debe conocer las etiquetas H1, H2, H3, etc., así como tener conocimientos del title y la metadescripción. También debe saber aplicar negritas en las palabras clave, subrayar correctamente y tratar con sinónimos, otros de los grandes protagonistas del SEO. Pero estos detalles técnicos resultan una gota de agua en el torrente de esfuerzo e imaginación que ha de emplear.